18/Enero/2005
Beatriz del Castillo y Eduardo González

Rigoberto Benítez Trujillo, director de Comunicación y Relaciones Públicas de la Universidad Autónoma de Puebla, minimizó las acusaciones del diputado Felipe de Jesús Díaz respecto a que la máxima casa de estudio gastó más que la  UNAM en rubros como teléfono, papelería y promoción al señalar que no presentó ningún documento que avale su dicho. 

Benítez Trujillo calificó de poco serio al legislador por asegurar que a la universidad se le negaron 150 millones de pesos ante el rumor de que el ex rector Enrique Doger Guerrero contendería por la alcaldía: 

 “Me parece que el que un legislador reconozca que se actúo con base en un rumor habla de poca seriedad, por eso la imagen de los diputados está tan deteriorada”. 

Consideró que el comentario del diputado obedece a cuestiones políticas –dado que él emana del PAN y el ex rector contendió por el PRI- y le recordó que la contienda del 14 de noviembre quedó atrás e incluso ironizó: 

“Ya hasta el diputado Rogelio Flores dejó las acusaciones contra la institución”.  Cabe recordar que dicho legislador panista acusó a la institución de desvío de recursos a favor de la campaña de Doger Guerrero. 

El director de Comunicación pidió al legislador que así como debe explicar de dónde sacó las cifras que avalan mayores gastos por parte de la UAP que de la UNAM, investigue el rumor de que funcionarios federales están implicados en la compra del Tamarindillo en Michoacán. 

Le cuestionó también  las promesas incumplidas de Vicente Fox referente a más recursos para las Instituciones de Educación Superior y la reducción del presupuesto en rubros como Ciencia y Tecnología. 

A su vez, el diputado priísta, José Luis Flores Hernández, integrante de la comisión de Hacienda y Crédito Público del Congreso de la Unión, rechazó que la UAP haya gastado más recursos que la UNAM durante 2003, y consideró que los señalamientos del panista Felipe de Jesús Díaz González sólo pretenden meter “ruido” en el proceso electoral que se desarrollará este año en la institución. 

Admitió que los porcentajes de gasto en algunos rubros como teléfono, papelería y promoción de la universidad poblana, pueden ser mayores a los de la máxima casa de estudios del país, sin embargo a nivel general remarcó que el presupuesto es inferior. 

La postura tiene que ver con un interés político en la UAP, dijo, ya que en las mesas de trabajo del Congreso nunca han tocado el tema, “es parte del proceso de sucesión (en la rectoría), pero estamos pendientes del trabajo de la UAP, que lleva transparencia de los recursos”, sostuvo.